El ovetense Pablo Álvarez, del Llagar La Morena de Viella (Siero) es el actual campeón regional de escanciadores de Asturias. Sigue peleando por mantener su puesto, aunque en esta edición el nivel es muy alto y la lucha por el primer premio está siendo muy disputada. Las diferencias entre los tres primeros son muy ajustadas pero él, en esta entrevista para Sidranews, lo tiene claro y está convencido de volver a ganar.
-¿Está siendo difícil mantenerse arriba en este nuevo campeonato de escanciadores?
- Si, van 15 concursos y estamos 3 personas en liza, con unas diferencias muy ajustadas, veremos que sucede en las próximas fechas. Por otra parte se observa otro año más cómo el sistema de puntuación del 75% perjudica al más regular, beneficiando al que menos puntúa ya que quita notas más bajas.
-Háblanos de ti y de tu afición por la sidra y el escanciado...
- Soy de Oviedo, tengo 26 años y desde que empecé a escanciar el mundo de la sidra me pareció apasionante, con lo que poco a poco me fui especializando en el arte del escanciado y aprendiendo cosas sobre la sidra, de la que nunca se sabe todo.
-¿Cada vez hay mejores escanciadores?
- A nivel de campeonato está existiendo un grandísimo nivel con mucha gente que acude a cada concurso con opciones de vencer. A nivel de sidrerías hay muy pocas que le den el trato debido a la sidra, tanto en calidad temperatura y almacenamiento y de consumo y escanciado. Por ello el primer objetivo sería inculcar dichos criterios al cliente para que el mismo sepa dar un salto de calidad.
-¿Crees que podrás ganar este campeonato. Quién es tu principal contrincante?
- Sí, cada vez que voy a un concurso es porque estoy convencido de poder ganar. E día que no piense así me retiro. Mi principal contrincante es sin lugar a dudas Wilkin Aquiles aunque sigo siendo el vigente Campeón.
-¿Cuáles son las virtudes de un buen escanciador?
- Aunque es díficil incluir estos parámetros en la competición, un escanciador debe conocer las características de la sidra a escanciar y así poder potenciarlas ajustando la inclinación del vaso o el grosor del chorro, por ejemplo. Aunque con el nivel actual un culín que no se machaque, azote o se mueva el vaso es aceptable. Si además el escanciador es capaz de ajustarse al decálogo del escanciador será un escanciador excelente.
